En China, la tradición dice que se originó a partir de estandartes y banderas ondeando en el viento; de ahí que su uso estuviera ligado a menudo a los altos rangos, aunque no necesariamente a la realeza china.
Sin embargo, por lo menos en una ocasión, se cuenta que el emperador salió de cacería protegido con 24 sombrillas. En este caso, eran para defenderlo de la lluvia, más que del Sol.
Los chinos fueron los primeros en impermeabilizar sus sombrillas para usarlas como protección para la lluvia. Enceraban y barnizaban sus parasoles de papel para convertirlos en paraguas.
El diseño chino fue llevado más tarde a Corea y Japón, así como a Persia, a través de la Ruta de la Seda. Los parasoles chinos y japoneses, usados cerca de los templos, siguen siendo muy similares al diseño original de la antigua Dinastía Wei.
El uso de la sombrilla en el Oriente estuvo casi siempre ligado a la realeza o por lo menos fue insignia de un alto rango social. Por ejemplo, en el Reino de Siam, solamente algunos súbditos escogidos del rey podían usarla.
Una sombrilla con varios círculos, como si varios paraguas fueran colocados en el mismo mango, era permitida sólo para el rey. Los nobles cargaban una sombrilla sencilla de la que colgaban telas pintadas; los monjes usaban unas más rústicas, elaboradas con hojas de palma cortadas y dobladas, con el tallo como mango.
En el Sur de Europa, las sombrillas se usaban en las ceremonias de la Iglesia Bizantina; eran sostenidas sobre la Hostia en las procesiones y formaban parte de las insignias papales.
La sombrilla papal o umbraculum es una pieza histórica que se usaba para dar sombra al Papa. También conocida como pabellón, actualmente se usa como símbolo de la Iglesia Romana Católica y la autoridad del Papa sobre ésta.
Se encuentra en todas las basílicas del mundo, colocada en un lugar prominente a la derecha del altar principal. Cuando un pontífice llega a visitarla, se abre su umbraculum.
La sombrilla papal es parte del escudo de armas del Vaticano mientras la sede está vacante, es decir, entre la muerte de un Papa y la elección de su sucesor.
A partir del Siglo XVI, las sombrillas o paraguas se popularizaron en el mundo occidental, especialmente en el lluvioso Norte de Europa. Al principio, se les consideraba accesorios femeninos. O, según los ingleses, para mujeres y franceses.
Texto: http://radioredam.mx/grc/redam.nsf/vwALL/LEVO-8FDQ49
Fotos: Internet
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